Como todos sabemos conocer la
estructura de una proteína es clave para entender su funcionamiento. Descubrir
cómo es una proteína puede ayudar a entender ciertas enfermedades y el diseño de
otras puede contribuir a curarlas Una proteína puede adquirir diferentes conformaciones
y eso es algo que trae de cabeza a los investigadores en sus trabajos pues las
técnicas actuales necesitan de mucho tiempo y dinero.
Por ello la Universidad de Washington
ha creado un juego en el que los jugadores pueden modificar la estructura y la
forma de las proteínas. El juego recibe el nombre de Foldit y ha permitido a
varios jugadores de todo el mundo encontrar la proteína inhibidora de las
proteasas que el virus del sida necesita para replicarse. Con este juego el
trabajo de investigación de años puede verse resumido en varios días.
El juego utiliza la capacidad de las
personas para resolver puzles tridimensionales y lo aplica a la búsqueda de una
mejor proteína. La modificación de las proteínas por parte de los jugadores
puede generar proteínas lo suficientemente buenas como para hacer reemplazos
moleculares y diseñar medicamentos antirretrovirales (según afirman los
investigadores de la Universidad de Washington)
(Imágen del uso de Foldit)
Ester Gallego Fernández